Conociendo a México y al mundo

Formación del nuevo Estado Mexicano
Por: Raona Reuguer

Con la última fase del caudillismo, en la cual caía Álvaro Obregón, asesinado en 1928, el cual aglutinaba y arbitraba los diferentes grupos revolucionarios, se generó el vacío de una fuerza unificadora y con ello, se abría el peligro de una nueva guerra civil, pero por lo mientras Calles logró no sólo impedir este peligro, sino que dio inicio a la búsqueda del mecanismo que diera cauce a las inquietudes políticas del grupo revolucionario.

Ahora lo que quedaba hacer era una restructuración de la política nacional bajo el presidencialismo, ya que el poder político descansaba en personalidades, con el predominio de los militares, que en instituciones, de las cuales había llegado el momento de utilizarlas.

El Partido Nacional Revolucionario (PNR), La nueva organización se propuso "mantener de manera permanente y a través de la unificación de los elementos revolucionarios del país una disciplina de apoyo al orden legal creado por la Revolución mexicana".

El proceso de institucionalización provocó la cancelación de la reelección, la profesionalización del ejército para dar inicio a la centralización del poder político; y por otro, crear un mecanismo para la transmisión pacífica del poder. La sucesión ahora será en un plan sexenal a partir del año de la sucesión presidencial de 1933 en el que Lázaro Cárdenas sería el promotor del agrarismo, y su gobierno se caracterizaría por llevar a cabo amplias reformas sociales y económicas como ninguno de sus antecesores.

La institucionalización del poder personalizado, para dar paso a la era institucional, al crear un canal (el PNR) para la transmisión del poder de manera pacífica y que más tarde, éste mismo se cambiaria en PRM que a su vez, el cambio hacia el Partido de la Revolución Mexicana fortalecía el poder presidencial.

La estabilidad política del país ha sido preservada, entre otras cosas, por el sistema de recambio que se produce entre los titulares de los órganos de decisión política. La no reelección presidencial y la limitación impuesta por cuanto a las posibilidades de reelección en el caso de senadores y diputados ha garantizado la
posibilidad de que el grupo en el poder crezca progresivamente.