Legitimidad y gobernabilidad en México ante el modelo neoliberal
Por: Raona Reuguer
Tanto de la Madrid como Salinas, Zedillo, Fox y Calderón han instrumentado toda una serie de medidas sumamente impopulares y contrarias al interés de la mayoría de los ciudadanos. Les han llamado reformas estructurales, y el argumento que utilizaron para emplearlas, era de que eran medidas indispensables para el buen funcionamiento de la economía y para evitar la inflación y la devaluación consiguiente de la moneda. Este conjunto de medidas representó la transferencia gigantesca de masas de capital considerado como perteneciente a la sociedad, dado que era propiedad de empresas públicas hacia grupos empresariales privados (privatización de Telmex, ruta 100, y CFE).
En cuanto a la legitimidad, han acudido a una serie de prácticas tendientes a mantener la gobernabilidad de la sociedad. Con el objetivo de lograr un consenso pasivo de la población, Salinas creo, aconsejado por las instituciones financieras trasnacionales, el llamado programa nacional de Solidaridad, sistema que distribuía recursos entre la población empobrecida por el sistema para mantener el consenso. Mientras que Fox continuó con el programa de “oportunidades” que tenia mas o menos la misma función.
Además está también el último recurso para mantener la gobernabilidad, que ha sido la manipulación de resultados electorales.
Todo parece indicar que los gobernantes neoliberales continuarán tratando de imponer reformas estructurales en contra del sentir de la mayoría de los ciudadanos, mientras que la sociedad mexicana sólo espera una transformación de grandes alcances, capaz de reestructurar el tejido social y otorgarle un nuevo sentido al desarrollo.
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